Hostal Isabel

El hostal es anticuado, pero adecuado y limpio. Tiene un aire a ir a casa de la abuela, dónde te gusta comer y te sientes en casa. La comida es casera y nada cara para lo que llenan los platos. Lo que más destaco es la amabilidad del personal, fuimos con dos niños y salieron encantados, ¡nos dicen que quieren volver!

Hostal muy bien ubicado en el corazón de Bronchales. Excelente trato y sobre todo ¡excelentes vistas! Lo recomiendo al 100% Personal muy amable y atento. Las habitaciones están limpias y adecuadas. Desayuno y postres muy ricos. ¡Me encantó la experiencia!

Fui de escapada con unas amigas, lo elegimos por el precio y creo que en cuanto calidad-precio es perfecto. El personal muy amable, les preguntamos por unas rutas y nos ayudarán un montón. La comida casera y rica, es como comer en casa. Lo mejor es que está muy cerca de todo. ¡Volveremos!

El personal es muy amable y está situado en cerca de muchas rutas de senderismo, justo lo que mi mujer y yo buscábamos. Recomiendo encarecidamente que comáis en el restaurante, comimos un codillo que se te hace la boca agua, además tiene un menú al mediodía, bástate económico.

Sorprendido al ver alguna valoración mala, pues mi experiencia fue totalmente lo contrario. Estaba realizando un recorrido de varios días en bici con todo preparado para dormir siempre en refugios y vivac, un imprevisto me hizo necesitar alojamiento de ultima hora y supieron ayudarme en todo lo que necesitaba. Lugar familiar, limpio, acogedor y con todo lo necesario para hacer una o varias noches conociendo estas tierras llenas de sitios que merecen mucho la pena y a un precio muy económico. Personal encantador, desde el que parecía ser el dueño del hostal hasta el chaval joven que me atendió por la mañana sin olvidarme de los riquísimos bocatas de la cocinera. Si puedo volver a Bronchales sin duda volveré a este sitio.

Hostal modesto pero aceptable para pasar la noche. Pepe nos recibió muy amable pero nos estafó en la cena y desayuno. Los precios fueron desorbitados como por ejemplo cobrar un bocadillo de tortilla francesa para llevar a 6 euros. El desayuno de 2 cafés con leche, zumo de melocotón, cholet y tres magdalenas por 18 euros... por ejemplo. No se pueden cobrar esos precios en un lugar así, nos hemos sentido estafados. Se aprovecha de que sabe que nos vas a volver y no le da reparo alguno.