Hotel Rural El Nido de Pinares

Nos alojamos en el Nido de Pinares en el contexto de un viaje familiar en el que éramos 15 personas. Las habitaciones son muy amplias y la cama supletoria que hace que quepan tres en una habitación es una cama completa como cualquier otra lo que lo hace muy cómodo, esta amplitud no es común en hoteles rurales que suelen ser mas contenidos en cuanto al espacio. Las habitaciones permiten a cada uno tener su espacio individual y tranquilo a pesar de ser un grupo grande. No conocíamos la provincia de Soria y esta zona nos sorprendió. Navaleno está rodeado de grandes zonas de bosque por donde pasear con excursiones para todas las edades. Domingo, el propietario del establecimiento, es estupendo y te da toda la información que necesites para disfrutar de la estancia, excursiones, sitios donde comer y cenar, que hacer por la zona etc. Puedes reservar sin tener nada planeado y durante el desayuno Domingo te organiza uno pues conoce todos los sitios en la zona. Si vas en Otoño/invierno cuando oscurece antes la casa tiene una planta baja con sala de juegos, karaoke, billar para que todo el mundo pueda estar entretenido. Nosotros no usamos el SPA pero lo vimos y tenía una pinta estupenda. Sin duda un lugar para repetir.

No hemos podido estar mejor. Hemos ido a unas rutas de bici con los amigos. Domingo nos ha tratado como reyes. Nos ha dado toda la información necesaria de la zona, amabilidad, predisposición, generosidad y flexibilidad. Instalaciones otro 10. Habitación amplia, limpia, camas muy cómodas y temperatura perfecta. Gracias Domingo

Espectacular! Perfecto para descansar, desconectar en pareja, en familia ..con amigos.. Te hacen sentir como en casa, te cuidan, te asesoran ..orgullosos de su entorno, te muestran donde ir, qué hacer. Sin duda, volveremos. La casa muy acogedora, habitaciones muy amplias y limpias. ¡ Domingo, volveremos! Gracias por acogernos en tu casa.