Leonera Hotel

Reservamos para pasar el fin de semana, ya que íbamos al recital de Luis Jara en el Gran Arena Monticello, y era lo único que estaba disponible. El camino es expedito hasta que llegas al camino de acceso que por 3 kilómetros es de tierra. Llegas al hotel y te encuentras con un entorno hermoso y bien mantenido, las instalaciones perfectas. La hora de check in es a las 15.00 hrs., por lo que decidimos almorzar en el bar, puesto que el restaurante estaba cerrado a esa hora. La verdad nuestra experiencia no fue buena, solo tenían la mitad de la carta de sandwich disponibles, pero aún así no teníamos otra opción para comer. Los precios son bastantes elevados versus la calidad, un sandwich de jamón serrano en pan ciabatta pequeño alrededor de $15.500.- La habitación impecable, una noche tiene un valor de $278.000.- e incluye solamente el desayuno buffet. Cama king extremadamente cómoda con almohadas confortables. No hay TV en la habitación, ni frigobar. Si deseas agua debes salir a buscarla a dispensadores ubicados en los pasillos. Es un poco extraño ese sistema. El baño espacioso, aunque solamente te dejan un solo jabón para el fin de semana, faltan más detallitos para encantar a los visitantes. El entorno insuperable, la granja bien cuidada y cada espacio delicadamente decorado. Se respira paz y tranquilidad. Recomendable vivir la experiencia, aunque como recomendación deberían preocuparse de los detalles que marcan la diferencia.