Hotel Brisas la Gaviota Mariquit-Tolima

Antes que nada me gustaría agradecer a los empleados por su excelente trabajo y la amabilidad ofrecida durante mi estadía y la de mi familia. Sin embargo tengo que hacer una crítica constructiva hacia la gerencia y administración del hotel, la cual mintió en múltiples aspectos prometidos en la oferta del hotel y nos dejó una mala experiencia. Las principales inconformidades en nuestro estadía fueron las siguientes: 1. Ver extensas jornadas de los trabajadores sin descanso: me parece injusto que los empleados cumplan jornadas de trabajo tan exageradas y de trabajo continuo. Hubo empleados del restaurante que hicieron turnos desde las 7 am del 31 de diciembre hasta la 1 am del 01 de enero (+18 de horas de trabajo continuo) y regresaron nuevamente a las 7 am del 01 de enero (es decir, descansaron menos de 5 horas para regresar a trabajar después de dicha exagerada jornada de trabajo). ¿Qué clase de jefe puede explotar a sus trabajadores de esta manera? El encargado del restaurante tiene cero empatía con sus trabajadores. Aún así, un aplauso para los trabajadores que siempre mostraron la mejor actitud. 2. Habitaciones del hotel: Nos ubicaron en una habitación extremadamente estrecha, había una cama principal y 2 bases camas tiradas en el suelo, improvisadas e interrumpiendo el paso y dejando el cuarto muy muy estrecho. Adicional, las bases camas no tenían colchones sino colchonetas, siendo este un lugar muy incómodo para dormir y que no propicia un buen descanso. Solamente pudieron descansar de buena manera las 2 personas que durmieron en la cama principal. 3. El hotel asegura que tiene Wifi sin embargo no funciona, con el agravante de que la señal de los operadores no entra en el hotel. Por lo tanto, no hay comunicación en el hotel. 4. Se pagó por una costosa cena de fin de año (+170.000 COP por persona) la cual fue una decepción, ensalada llena de apio crudo, rollos de harina muy duros y quemados, solamente rescataría la carne la cual estaba jugosa y en buen punto de cocción. 5. El hotel aseguró que contaba con mesa de Ping pong, lo cual era falso y refirieron que se había dañado 2 meses atrás y nunca la repararon (sin embargo, siguen publicitando el hotel con la mesa de Ping pong). En general, la mayoría de ofrecimientos de servicios del hotel fueron falsos, debido a que casi todos los planes o actividades son realizadas por otro proveedor de servicios externos y tienen un costo adicional, siendo esto una decepción porque los costos del alojamiento son elevados. El alojamiento solo incluye una caminata por las cosechas cercanas y frutos del sector y un recorrido ganadero. Como también hay cosas buenas, debo reconocer nuevamente las atenciones de los empleados y su disposición por ayudar. De hecho las personas del restaurante se merecen un gran aplauso por el trabajo realizado, brindando almuerzos de muy buena calidad, atendiendo una cantidad muy grande de clientes y lidiando con una clara escasez de personal, puesto que eran muy pocos trab

Es un alojamiento muy bien situado en Mariquita que goza de espacios de un complejo hotelero. Está muy estandarizado, muy buen servicio, limpieza fenomenal, amplia carta de comidas y servicios complementarios que te instan a estar al menos dos noches. Destaco el tour de los sentidos (frutal), el tour de campo y la pesca artesanal. Salí feliz de este lugar y espero volver pronto. Es impresionante el gran servicio que ofrecen.😍 Abrazos!